Animal Bank en la COP16 ¡Participación en un evento clave para la biodiversidad!
Estamos emocionados de participar activamente en la COP16, uno de los eventos globales clave para…
Por: Ana María Castaño – Socia de la SAO desde 1993
Los observadores de aves se han caracterizado por ser quienes más información han aportado a los ejercicios de ciencia ciudadana en el mundo. Y, ¿qué es la ciencia ciudadana o investigación participativa? Es la forma en la que la gente del común apoya a la academia por medio de observaciones sobre las especies y los ecosistemas, con anotaciones, fotografías, grabaciones que son posteriormente analizadas y publicadas.
DATAves, una herramienta para la colección de datos de avistamiento de aves creada por la SAO en 1989, marcó un hito en el manejo de la información y de la ciencia ciudadana, pues permitió que se hicieran, con un solo click, consultas sobre las observaciones de aves y sobre diferentes variables de los sitios visitados.
Los socios podíamos solicitar un listado de las aves que nos indicaba incluso el porcentaje de veces que la especie había sido avistada en alguna localidad, hoy puede parecer algo sencillo, pero a principios de los 90´s, esto era una cosa extraordinaria.
Estos listados contenían información como especie, familia, estatus de conservación, características de la localidad, anotaciones sobre sitios y temporadas de anidación y estimaciones de rangos altitudinales para las especies basados en los registros de máxima y mínima altura registrada.
Esta herramienta nos ayudaba a todos, razón por la cual, en retribución, hacíamos aportes de nuestros avistamientos que entregábamos a la secretaria de la SAO, ella los digitaba y luego eran ingresados a DATAves. Todo un avance tecnológico para la época. Para el año 1993 DATAves contaba con más de 5.000 registros de alrededor de 750 especies en 60 localidades de Colombia.
Alrededor del año 2000 empieza el desarrollo de la tecnología WAP y con ella proliferación de apps. Los años 2007 (lanzamiento del IPhone) y 2008 (lanzamiento de Android), marcaron la forma como accedemos y enviamos información desde nuestros dispositivos móviles. La observación de aves y de la naturaleza no fue ajena a estos desarrollos.
En el año 2011 la Academia de Ciencias de California crea iNaturalist, una plataforma para los amantes de la naturaleza que se ha constituido en una de las bases de datos más poderosas del mundo en el número de aportes a las ciencias que estudian la biodiversidad. Su misión es usar la tecnología para conectar la gente a la naturaleza al mismo tiempo que generan datos para la ciencia.
Para los observadores de aves colombianos ha sido más cercana otra de las apps muy exitosa: eBird, creada por el Cornell Lab of Ornothology, disponible desde el año 2010, célebre por convocar a la celebración de Global Big Day en mayo y October Big Day en octubre, eventos en los que la comunidad de observadores de aves colombiana se ha destacado por su unión en torno a las aves.
La información alojada en eBird ha sido usada para la toma de decisiones sobre conservación de aves y sus hábitats y ha servido como sustento para la preparación de numerosos artículos científicos y de proyectos estudiantiles que estimulan la investigación sobre aves. Cada usuario puede enlazar eBird con Merlin y que, al hacer la identificación, se suba la especie a sus listados.
eBird permite llevar las estadísticas de nuestros avistamientos; bajar listados de las especies de una localidad; bajar todas las localidades donde ha sido observada una especie en su rango de distribución y, formularnos un sinnúmero de preguntas desde la ciencia y la curiosidad ya que todos tenemos acceso a la información generada por el colectivo de usuarios.
Birdnet, una de las apps nuevas, se asemeja bastante a Shazam para los cantos de las aves, permite hacer la identificación de las aves de nuestro entorno a partir de grabaciones de los cantos y llamados.
En el año 2016 gracias a la iniciativa de Leandro Vargas, Guillermo Gutiérrez, Gabriel Ángel y otros aficionados del municipio de Jardín en Antioquia, nace Cotinga, gracias a los aportes de Colciencias y el SENA.
Busca divulgar el turismo de naturaleza como motor del desarrollo del municipio. Cuenta con una base de datos de sitios con potencial turístico, guías locales y casi 300 especies de la zona, para las cuales se ideó un algoritmo que, a partir de características como colores, tamaños, hábitos y formas, permite determinar la especie.
Bird Data Colombia, es creada por Tom Friedel para facilitar el acceso a información sobre las aves del país. Al igual que eBird, Bird Data Colombia requiere del conocimiento de los nombres científicos o comunes de las aves y por ello es limitada para usuarios que tienen cierto nivel de conocimiento de las especies.
Bird Data Colombia provee acceso a distribución, hábitos, ecología, subespecies y otras características de las aves consultadas.
En Medellín se crea Avistapp, enfocada en las especies de aves de algunas rutas para el avistamiento de aves de la ciudad, esta app se convirtió en una iniciativa de turismo de naturaleza y de ciencia ciudadana que presta actualmente sus servicios en la ciudad y sus entornos.
Área 24/7 es una app que integra cinco aplicativos que buscan facilitar la vida de los ciudadanos en el Valle de Aburrá, desarrollada por Área Metropolitana del Valle de Aburrá, uno de los cuales permite acceder a información sobre la diversidad de flora y fauna y permite la identificación y registro de algunas especies de aves y compartir lo observado con otros usuarios.
En redes sociales hay muchos grupos enfocados en diferentes temáticas. Hay, por ejemplo, un grupo en el Valle de Aburrá que reúne a más de 1000 personas que reportan las Guacamayas, Loras y Pericos.
Las organizaciones ornitológicas y los grupos de avistadores tienen redes sociales y han creado grupos de Whatsapp en los que hay colaboración constante entre los miembros, muchos de ellos novatos, quienes preguntan por recomendaciones básicas para la compra de equipos de avistamiento y fotografía, sitios para visitar, identificación de especies a partir de descripciones, fotos o cantos.
Siempre, varios entusiastas, un poco más conocedores, dedican su tiempo para compartir generosamente el conocimiento y fortalecer el ánimo de quienes apenas comienzan.